Estás en mi mente, te caes y desciendes y estas tan lleno de cosas que me gustan, que tiemblo y muero por cada beso de tu boca que cae también y sigue descendiendo tan lejos y profundo que se me olvida.
Te quiero y me odio por no poder tenerte dentro de mi mente que sin querer se olvida de ti, que cuando te vuelve a recordar tu no estás, y te alejas y conviertes en un lento letargo mi vida que retumba en mi sien si de alguna manera no vuelves a aparecer, de algún modo, gracias a alguna circunstancia creada por los dos te busco y ahora vuelves a desaparecer.