Supuestamente eso era lo que tenia que hacer, apretar los dientes he irse de una buena vez de aquel lugar, un lugar al cual le tenia cariño, pero que lamentablemente ya no había nada mas que hacer. Las habitaciones y las casas de aquel sitio irreconocible para los demás guardaban secretos y momentos que en realidad no eran tan desechables sino mas bien perpetuos, fotos perfectas con movimientos, coyunturas inolvidables, posibles escenas para nuevos sueños nostálgicos, recuerdos entrañables de quizás una infancia feliz, pero a estas alturas ya nada era seguro, todo estaba un poco perdido, pájaros sin alas, árboles sin hojas ,casas sin puertas sin ventanas ni paredes.
Pero una cosa si había que hacer a pesar de todo , la partida tenia que ser memorable, una huida perfecta en la autopista, haciendo creer a los automovilistas que la vida de aquella chica ya estaba resuelta, en un descapotable con anteojos gigantes, típica escena, una princesa del autopista con vida resuelta, con ganas de llegar muy lejos a un lugar sin prejuicios ,se me viene a la mente cuando ella cruza la frontera de los recuerdos y poetas malditos, la tragicomedia había acabado por fin, ya vendría la hora de nuevos actos poéticos.

La cruda escena de depender de los prejuicios era el recuerdo que más dolía, cosas tan pequeñas que se habían aprendido en una prejuiciado vida desgastada, que las putas son malas y las monjas son buenas era algo que ya se había sembrado en la mente de la humanidad, pero desde que éramos niños hasta ahora todo se había confabulado para la confusión, por que la chica había conocido a una puta llamada inmaculada que curaba el sarampión de los reclutas, y una monja que en el colegio de niñas la había empujado por las escaleras.
Pensando tener la vida resuelta habían varias cosas que no encajaban, como el por que la maga fue madre si aun no estaba criada ella, por que los volantines vuelan y nosotros no, si supuestamente derivamos de la perfección y ellos son simples papeles sin vida, pero con mas colores que nuestras almas, por que la gente cree que el reloj de su muñeca va amarrado a su mano, siendo que ellos son esclavos del tiempo, por qué habían existido tantos amores reales en su vida siendo que sus sentimientos al verdadero no habían valido de nada, por que entregar cartas si era algo tan engorroso , perros persiguen a estas sin razón, quizás ellos si captan el mensaje , como las cartas de los amantes o las que anuncian una muerte. Por qué las personas que tienen la suerte de tener ojos sanos mueren rompiendo miles de mas parabrisas qué la gente que no pueden ver. Bueno, y la mas grande de las preguntas de su mundo compuesto por elefantes era: ¿or que escribía si no tenia ni una pizca de imaginación?, su motricidad manual era un desastre y sus demostraciones de cariño frente a los amados, el peor error cometido , aun mas que su soberbia, aquella chica no era una buena persona y todos lo sabían, algo había que los demás captaban y ella era conciente de todo esto. Lo que no es inimaginable para todos fue su razón para huir, el “no se qué” que nadie supo jamás.

Caminando frente a ella la calle se habría ancha para sus ojos miopes, y los semáforos bailaban a veces cuando sus pilas musicales funcionaban para acompañar el paso, la imaginación se habría cuando pensaba que quizás podría pasar esto o esto otro en todas las esquinas de todas las calles que recorría a diario, pensaba que alomejor se podía encontrar con él en alguna vereda y que le preguntaría hola como estas y el típico abrazo de la distancia que es tan lejano que llega a ser imaginación, y en realidad eso era, pura imaginación, era obvio que esas cosas no le pasarían a ella por que lo deseaba tanto que el destino se hacia el sordo y justamente cuando ya no lo deseaba las cosas ocurrían como por arte de magia , si, los encuentros fortuitos no eran como ella se los imaginaba, sino mas bien en las situaciones mas vergonzosas, y menos cuando ella era estupenda , solo ocurrían cuando ella era distraída y tonta, justo cuando ella era feliz.
Eso era lo que nuestro personaje le llamaba las confabulaciones de la mano invisible , la rutina era tan poco entendible, nada parecido a lo que ella había visto en las películas cuando era niña, por que en la rutina no existen ni los enanos ni los pegazos y ni los bosques en santiago, no hay hombres arios haciendo de príncipes ni pieles sin sarpullidos, la gente en las películas no sudan, solo cuando están gozando de la felicidad, en la rutina eso no pasa, la gente suda por que esta cansada.
Ahora la mujer de que les hablo ya comprendió por que la gente se vuelve loca, y es a causa de la gente que no le diagnostican locura, sino, Poder.